El cuento del reto demográfico

  ¿Quieren que les cuente el cuento del reto demográfico? Imagino que dirán que sí. Pues lo siento, yo no digo que sí ni que no, digo si quieren que les cuente el cuento del reto demográfico… Conocemos el cuento de la buena pipa, pues esto del reto demográfico es lo mismo, un cuento sin fin, pero tampoco con principio. 

  Cuando se vive en una comarca como la suroccidental asturiana, aquejada de todos los males que padece eso que hemos dado en llamar la España vaciada - término originado en el libro La España vacía: viaje por un país que nunca fue de Sergio del Molino – suena muy mal que nos hablen de impulsar una Ley del Reto Demográfico. Nos cabrea por llegar tarde y por la desconfianza que nos genera. Nos han prometido tanto y otro tanto han incumplido que el desánimo inunda el territorio.

  Eso de la Ley del Reto Demográfico es la última promesa del presidente Adrián Barbón. Parece que hubiera estado en otro planeta y se encontrase de pronto con el envejecimiento, la despoblación, la pérdida de puestos de trabajo, las deficiencias de servicios públicos y el estado lamentable de las comunicaciones de todo tipo en el suroccidente asturiano, sobre todo, pero que es ampliable a todo el occidente.

  He repetido esto mismo tantas veces que estoy cansado, pero no dejaré de elevar mi casi inaudible voz como forma de protesta.

  La política, no, la política no, los políticos consiguen mantener mi cabreo social en unos niveles muy altos. Visto lo visto no soy rara avis.

 Tengo sobrados motivos para que esas declaraciones del presidente Barbón me molesten. Por un lado está lo mencionado más arriba, por otro eso de que «toma nota» de los resultados de Castilla y León, y se refería al avance de las plataformas ciudadanas en esa comunidad. Es decir, tiene miedo a que en Asturias, y en concreto en el suroccidente asturiano, surja una iniciativa que les haga frente en las urnas. Podemos suponer, a tenor de sus palabras, que sin esas consecuencias en Castilla y León no se habría planteado la ley.

  Sonó muy mal, señor presidente.

  Otro de sus argumentos fue el del «crecimiento de la ultraderecha de Vox», sin duda cierto, pero que no tendría que venir al caso para la promulgación de esa futura ley.

  En relación con los resultados de UPL (Unión del Pueblo Leonés) habló de «sentimientos de la propia identidad» no sé en qué sentido lo dijo, pero habría que recordarle lo del intento de oficializar el asturiano que para muchos de suponía, ni más ni menos, eso mismo.

  No estoy mezclando churras con merinas. El propio Barbón lo hizo. En esas mismas declaraciones habla de que quienes sientan «frustración» por la imposibilidad de reformar el Estatuto de Autonomía la transformen en esperanza e ilusión en las elecciones de 2023, vamos, que le voten.

 ¿Ven? Retro demográfico, Estatuto de Autonomía, oficialidad del asturiano; un batiburrillo. No señor presidente, así su discurso no me resulta creíble. 

  Manifestó además, el presidente Barbón, que el PSOE tiene que hacer un análisis sobre el auge de las plataformas ciudadanas. Ya se lo digo yo, señor presidente, esos movimientos ciudadanos han surgido del abandono de su partido, los demás tampoco se libran. Se suponía – así, en pasado - que los socialistas tenían otras sensibilidades con las necesidades sociales, pero nada de eso, se han alejado de la sociedad. De ese distanciamiento emanan esas plataformas, al igual que con anterioridad perdieron la ascendencia que tenían en los denominados «cinturones rojos» de las ciudades. 

  ¿De verdad que tienen que analizarlo a estas alturas? Viven en una realidad paralela.

  Señor presidente, usted creo un puesto, el de comisionado para el Reto Demográfico, que ostenta Jaime Izquierdo. ¿Cuáles han sido sus frutos? Los desconocemos. Este hombre llegó a decir, cómo si fuese algo relevante, que el Plan Especial para el Suroccidente de Asturias estaba ejecutado, hablo de memoria. Ese plan especial era un plan corriente y moliente de obras y servicios. No sabemos a que se dedica. Tal parece otro Toni Cantó. En la práctica ese comisionado no sirve para nada. Eso sí, estoy seguro que dentro de un tiempo dará para algún que otro libro teórico. Es un cargo político y cómo tal lo critico.

  Entre la pandemia y la oficialidad del asturiano se nos ha ido, casi, la legislatura. En el caso del suroccidente asturiano se ha visto aderezado este tiempo con múltiples y variadas fanas (argayos), los parques eólicos, centrales hidroeléctricas y cosiquinas por el estilo, como son la continua pérdida de empleos, que en el caso de las mujeres es aún muchísimo peor, la emigración - que por aquí no es que vaya al galope, está desbocada - el envejecimiento de la población. En fin, somos uno de los paradigmas de la España vaciada.

  Las protestas vecinales de esta comarca, a las cuales apoyo en sus reivindicaciones, se centran especialmente en el tema de las comunicaciones terrestres. Bien está, pero creo que hay una cuestión más relevante: la creación de empleo. Si hay empresas las comunicaciones mejoran inmediatamente. Uno no excluye a lo otro, pero, repito, creo que la creación de puestos de trabajo es la prioridad. Les pongo un ejemplo de hace muy poco: se va a duplicar la calzada en la vía AS-17, entre Bobes y San Miguel de la Barreda, entre los puntos kilométricos 3,6 y 5,5. El gobierno de Asturias invertirá 23,4 millones de euros. ¿No les suena? Ese será el acceso a la zona industrial donde se está construyendo Amazon. La obra tiene un plazo de 24 meses, la mitad más que el puente La Barrosa (ironía, pero cerca se va a andar).

  La teoría dice que las comunicaciones abren posibilidades para las empresas, en este y otros muchos casos, es al contrario o van parejos.

  Para el mes que viene el consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, el cangués (de Cangas del Narcea) Alejandro Calvo, se comprometió a presentar antes de que finalice el primer trimestre de este año un programa plurianual de actuaciones para el Suroccidente. Es decir, nos va a contar el plan de obras y servicios para dos años, o lo que es lo mismo, hasta las elecciones. No va a suponer nada nuevo. Cuando las elecciones se acercan las obras que no se ejecutaron en toda la legislatura dan comienzo. No se emocionen, de creación de empleo nada de nada. Ver veremos.

  Esa Ley del Reto Demográfico quedará en nada en esta legislatura. Será palabrería sin ninguna concreción presupuestaria. De todas formas llegará tarde y dados los precedentes, lo siento, pero no espero nada de ella. Mientras no me hablen de creación de empleo, de esfuerzos reales por atraer empresas a la comarca todo será como el cuento del reto demográfico o de la buena pipa.