¿Le
gustan las ostras? ¿Le interesan las cosas celtas? ¿La música tradicional
bretona? No, Alan Stivell no aparece. Si es así y además le gustan las novelas
policíacas, tal vez, le guste Un cadáver
en Port du Bélon. Esta novela es la cuarta de una serie protagonizada por
el comisario Dupin por tierras de Bretaña.
Su
autor, Jörg Bong, firma con el seudónimo Jean-Luc Bannalec. Es un editor,
crítico literario y escritor alemán, aunque parezca francés. Oigan, que parece
francés pero muy francés. Su chovinismo cansa.
Las
loas al paisaje bretón, a la cultura, música o gastronomía me llegaron a
empachar. Me imagino que ya le habrán dedicado calles y levantado estatuas en
toda Bretaña.
¿Y
qué me dicen de las ostras? No las hay mejores en todo el mundo, son
inigualables. Me estomagaron.
He
tenido la sensación de estar leyendo una guía turística, mejor aún, una
apología turístico-gastronómica de Bretaña. Miren, si la idea fue escribir una
novela con fines propagandísticos turísticos ha sido todo un éxito. Según
cuenta la publicidad lleva más de dos millones de ejemplares vendidos de la
serie.
Por
vender vende hasta las libretas Clairefontaine y los bolígrafos Bic. Nada de
publicidad subliminal. Me imagino que en la versión digital se empezarán a
abrir recuadros publicitarios. ¡Ah! para los más chic nada de recuadros,
banner.
Pues
ya ven, de eso va Un cadáver en Port du
Bélon: ostras, bretonas; gastronomía, bretona; paisaje maravilloso,
Bretaña; naciones celtas, Bretaña sobre todo, y por el medio unos crímenes. Le
añade un jefe tonto y cabrón, unos compañeros en los que hay de todo un poco,
una señora mayor – eso sí, con estilo y personalidad – y la médica compañera
sentimental de Georges Dupin.
La
leí, si no lo hubiese hecho no tendría ningún vacío literario.
Una de ostras y Un cadáver en Port du Bélon by Santiago Pérez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
No hay comentarios:
Publicar un comentario