Hace
años la hija de un querido amigo, que por aquel entonces tendría quince o
dieciséis años, en uno de sus habituales debates, le espetó a su padre: “tú
eres un conservador de izquierdas y yo soy una progresista de derechas”.
Cuando
me lo contó mi amigo me partí de risa. Él se mostró ofendido y cuanto más
insistía en el tema, más me reía yo. Sucedió hace unos cuantos años y no lo he
olvidado. Hoy aquella joven es una mujer muy inteligente y con enormes
capacidades.
Esta
anécdota me viene a la cabeza leyendo un artículo de Nicanor García, Portavoz
de Ciudadanos en la Junta General del Principado de Asturias, en La Nueva
España.
El
portavoz de Ciudadanos nos habla de liberalismo y progreso desde un “enfoque
socioliberal, o liberal progresista”. Pues vale. Cada uno puede definirse como
quiera. Ahora bien, a mí me asaltan unas cuantas dudas con las afirmaciones del
portavoz de Ciudadanos.
Nicanor
García empieza hablándonos de superar viejas formas y para ello acude al referente
de Macron. Eso sí, sin dejar de recordarnos que Francia es un país de
revoluciones.
Pues
sí señor, lo es y además gracias a ellas nuestras democracias son lo que son. Aunque
ese espejo en el que se mira Nicanor García no sé si será muy adecuado. No es
por nada especial, lo digo vistas las últimas encuestas sobre la popularidad
del presidente francés en las que ha
descendido en diez puntos en un mes. El anuncio de los planes para el sistema
fiscal y la reforma de las leyes laborales han contribuido de manera rotunda a
este descenso.
Visto
esto me reafirmo en que no parece muy buen ejemplo. Si al portavoz de
Ciudadanos le sirve pues nada, allá él.
Nos
habla, Nicanor García, de una sociedad excesivamente funcionarizada. Este
cantar no es nuevo. Esta afirmación, negada por muchos, no explica por donde
piensa recortar el número de funcionarios. ¿Personal sanitario? Pero si estamos
viendo que no se pueden cubrir ni las jubilaciones de médicos. ¿Jueces? Cuando
todos estamos de acuerdo en que sí la Justicia es muy lenta es por falta de
personal. ¿Profesores? Oiga que las aulas están saturadas de alumnos.
¿Me
quiere explicar en donde metemos tijera? Esa pregunta no la responde Nicanor
García. Aunque lo que quiere decir, pero no dice -y no hay que ser adivino - es que está
pensando en privatizar aún más los servicios públicos. Así de claro.
Se
refiere también en su artículo el portavoz de Ciudadanos a la “transición del
mercado laboral hacia la era de la tecnología digital, imparable en un mundo
globalizado”.
Es
innegable el empuje de la tecnología digital, pero no hay que olvidar otras
industrias ni el mucho menos el mundo rural, que está a punto de extinguirse en
nuestro país.
Confirma,
Nicanor García, que el PP “pone todas las trabas posibles” en la lucha contra
la corrupción y para su desgracia -así lo da a entender - “hemos tenido que
pactar con el PSOE y Podemos”. Es una desgracia, desde luego.
Llegados
a este punto se acuerda del presidente de Murcia. Yo recuerdo el tiempo que
tardó Ciudadanos en tomar una decisión.
Cita
cuatro medidas: tarifa plana para autónomos, bajada IRPF para rentas más bajas,
complemento salarial para menores de treinta años e incremento de tiempo para
la paternidad. Se le llena la boca con eso del carácter progresista de
Ciudadanos.
Pues
vale, si todo su progresismo es eso pues
bien, señor Nicanor García.
Insiste
don Nicanor en las reticencias del PP a cambiar sus políticas, y se refiere al
acuerdo que realizaron con ellos para ejecutar 150 medidas. A pesar de ello no
se le ocurre dejar de apoyar al gobierno de Mariano Rajoy.
Luego
pasa ya a lo de casa: “Asturias necesita un gobierno innovador, que introduzca
reformas, que evite duplicidades en la administración, que prepare la
transición del mercado laboral hacia la sociedad del conocimiento…”
Veamos
señor García. ¿Qué innovamos? ¿Con quién innovamos? ¿De qué duplicidades habla?
Por favor, díganos a qué se refiere.
Y
ya para terminar, la sociedad del conocimiento es aquella que en gran parte
tiene que emigrar de este país, de Asturias, por falta de apoyo de las
instituciones públicas y las empresas. La sociedad, los ciudadanos, tenemos
muchos conocimientos, a pesar de los pesares.
Y
ya para rematar nos cuenta que Albert Rivera habló en la escuela de verano de
Ciudadanos de “la revolución que deber ser educativa, laboral y hacia la
innovación, y esto, junto con una regeneración de los partidos y de las
instituciones que hagan que la gente vuelva a confiar en la política…”. ¿Rivera
hablando de revolución? Usted que militó
en el CDS y luego en el PSOE ¿será parte de esa regeneración?
Palabras,
palabras y más palabras. Vaguedades. Un mensaje sin concretar que es como no
decir nada.
Nicanor
García puede estar encantado, yo como ciudadano no salgo de mi asombro.
Querida
amiga, no sé si seguirás pensando lo mismo. Espero hablarlo un día contigo, y
con tu padre – puede ser muy divertido-. Desde luego no te estoy comparando con nadie, me has venido gratamente a la memoria y nada más. Tengo que confesarte que estoy en la
línea paterna, qué le vamos a hacer.
Lo siento, por mucho que lo intento eso
del progresismo de derechas no lo acabo de entender.

Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-SinObraDerivada 4.0 Internacional.
Por alusiones aquí me encuentro jeje. Como tú dices, han pasado muchos años y si te soy sincera, no me han ayudado a ser más firme en mis convicciones sino todo lo contrario, a relativizar. No me caso con nadie y soy un poco veleta aunque intento no ser incoherente (y generalmente lo consigo) Un saludo, Santi
ResponderEliminar