El Campo de San Roque, en Tineo, tiene algo
especial. Un gran prao, unos árboles
en su parte superior, una capilla en un lateral y, un poco más allá, una
casina. Eso es todo.
Pues con ser eso todo, para los tinetenses es
mucho.
La importancia de ese Campo está vinculada a las
emociones, los recuerdos y la historia local.
De aquella feria de ganado, en torno a la capilla,
surgió la fiesta. Y con la fiesta la rifa de la xata, documentada ya a
principios del s. XIX.
La xata de Tineo es muy festera y con meses de antelación ya la pasean de fiesta en fiesta.
Los días de mercado, los jueves, no se los pierde. Así, como el que no quiere
la cosa, los tinetenses tienen la vista puesta en el Campo de San Roque con
mucha anticipación.
El campo de San Roque concita familias, amigos,
sensaciones, recuerdos…amores: “En el campo de San Roque yo perdí una liga
verde ¡Ay, del campo de San Roque donde las ligas se pierden!”
¿Cuántas pasiones habrá despertado este prao? ¿Cuántos deseos? ¿Cuántos
desamores? ¿Será por eso que este campo está en el corazón de los tinetenses?
No lo sabemos y además no importa.
Las fiestas de San Roque están en las entrañas de
los tinetenses y siempre asociado a ese campo. ¡Ay, del campo de San Roque…!
lugar de ensoñación y de ilusiones.
A la luz del día se celebran las comidas y
meriendas de familia y amistad. Los reencuentros efusivos. Todos se convidan.
La visita a la caseta de Las Cabezas de San Juan es cita obligada.
Las peñas toman posesión de su espacio en la zona alta del campo y allí vivirán dos días con
sus noches. Provienen de todo el concejo, algunas están integradas por padres y
abuelos, pero ahí siguen. Cada año se crea alguna nueva. El permiso paterno
para trasnochar por San Roque conlleva la creación de una peña. Con ese gesto,
su entrada en la edad adulta se confirma.
En el campo de San Roque yo perdí una liga verde.
Y será verdad… o no. Eso allá cada dos.
¡Ay, campo de San Roque! cuantas alegrías has
dado.
Los que han estado en estas fiestas de Tineo
repiten, los que no tienen que acercarse al campo y comprobarán que su magia
les envolverá. Luego, sí quieren, pierdan ustedes la liga verde.
¡Ay, del campo de San Roque donde las ligas se pierden! by M. Santiago Pérez Fernández is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
No hay comentarios:
Publicar un comentario