Tras el desastre electoral
socialista el PSOE anda revuelto. Unos que estuvieron en el gobierno quieren
hacernos creer ahora que ellos no tuvieron ni arte ni parte en nada. Pues vale.
Otros, con cargos relevantes, nos dicen que ellos son la única salvación.
Apelan a su sacrificio, valía y dedicación. Pues bien.
Hay quienes desde las baronías se
erigen también en oráculos y nos informan por donde deben ir los tiros. Tras
estos están los ex –ex presidente, ex
ministros, ex presidentes autonómicos, etc. – y está bien escucharles. Las
voces del pasado tienen que tener su espacio. Por haber casi hubo una comida de
muchos ex, pero les pillaron antes de
tiempo y se malogró. ¿De verdad que con posterioridad no se celebró o va a
celebrar esa comida? Me da a mí que sí.
Gentes que teníamos casi
olvidados, no por nada especial, simplemente es que no les oímos en todo este
tiempo, ahora afloran. Viejos candidatos resurgen. ¿Por dónde dicen que
anduvieron estos últimos años?
Quien hace poco no quiso dar un
paso al frente, por mor de la unidad y se retiró con lágrimas en los ojos, no
dice si ahora sí. No es el momento aún, aunque pulula en busca de apoyos y
acomodo.
Lo que no fue hace unos meses, no
interesaba, igual ahora sí, pero cuidado… con candidatos conocidos, fiables y
que no vengan a suponer una ruptura con lo visto hasta ahora. Cambio sí, pero
suavecito y ni siquiera de caras. A poder ser de las ya conocidas ¿para qué
vamos a experimentar? Pues eso.
Hasta ahora todos los movimientos
son para perpetuar a dos ministros, para que no queden dudas, a un ex ministro
todo poderoso y a una ex ministra. En otras palabras: cambiémoslo todo para que
todo continúe igual.
Parándose a pensar un poquito,
unos no han dicho ni mú hasta ahora.
Todo les parecía bien. Otros han perdido estrepitosamente las elecciones y aquí
no dimite nadie. Faltaría más. Si los demás no lo hacen, van a ser ellos los
primeros ¡y un jamón! Otros, es público y notorio, han gestionado las cosas
públicas mal, pero que muy mal. Reconózcanlo, han dejado unos pufos de narices
y por lo tanto no pueden ser candidatos. Otros tendrían que apoyar, asesorar,
dada su experiencia, pero de ahí a mangonear hay un trecho.
Venga, para que nadie se pierda.
Estoy hablando de Rubalcaba, Alfredo, y Chacón, Carme. Todo preparado para
ellos, en principio. Entre los dos, la alternativa está clara: gana Alfredo.
Puede haber sorpresas, pero improbable. Luego está lo de las prisas. ¿A qué
viene tanta premura? Eso sí, antes de debatir en profundidad elegimos al secretario
general, luego él marca las pautas políticas y todo el mundo a aplaudir. Hay
dos explicaciones: o no se enteran o no quieren enterarse. Van bien, sí.
Todo este totum revolutum coexiste hoy en PSOE.
Pero aún hay más: los alcaldes.
Normal. El escaso poder político que aún mantienen los socialistas es el
municipal. Hace ya unas fechas que algún ex ministro devenido alcalde anda
preconizando las virtudes de los ediles ganadores. Pues bien. En esto como en
lo demás. Me explico.
Al PSOE ya no le vale con una lavadina de cara. Es el momento de
profundizar y de poner al frente savia nueva. Pero eso sí, no vale con mirar los resultados electorales. Quien se quede en eso que mire para la
Comunidad Valenciana. Al frente de los socialistas hay que poner gentes capaces
y de contrastada solvencia en su gestión.
Miren, cada uno puede pensar que
es el rey del mambo, pero dadas las circunstancias hay que pasar a todo dios
por el tamiz de la valía al frente de las cosas públicas. Yo no podría aceptar
a nadie que haya endeudado hasta las trancas su administración. No podría
apoyar a quien haciendo populismo no acomoda los impuestos a la realidad.
Estaría en contra de quien de una tacada dispara esos impuestos a un 10 un 50
por ciento o más, argumentando que en años anteriores no se subieron. Eso es
demagogia barata. Estaría totalmente en contra de quien ostentando un cargo
público, y con la que está cayendo, se subiese el sueldo más de un 10 por
ciento y en el que cobra todo quisqui
que está a su alrededor. No podría apoyar, ni por activa o pasiva, a quien
hubiese pleiteado a costa del erario público en causas perdidas por negligencia
manifiesta. Nos haríamos un flaco favor apoyando a quien nos va a dejar unas
infraestructuras que nadie sabe como se van a pagar. No merecería mi
consideración quien desea ostentar un cargo para medrar personalmente y siempre
ha sido dócil con el partido. Y podría seguir, pero ya me entendieron ¿verdad?
Los que no aspiramos a nada, los
que no tenemos deudas que pagar, exigimos decencia, honradez y sentido común
para volver a ganar la confianza del resto de los ciudadanos. Cuidado con las
apariencias. Todo acaba saliendo a luz y luego nos rasgaremos las vestiduras.
Posicionándose por M. Santiago Pérez Fernández se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.
Bien dicho para despedier el año, ahí queda eso.
ResponderEliminarMenos mal que hay gente que piensa con cordura y tiene dignidad.
ResponderEliminarHoy si lo he leido detenidamente, y estoy totalmente de acuerdo. El que quiera enterder que lo entienda, Y tiempo al tiempo... la mentira siempre acaba saliendo a la luz y el que no tiende nada que guardar ni esconder, siempre será libre. Feliz año, Santi
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo lo triste esque cosas tan obvias tengan que ser dichas .
ResponderEliminarMadre Santi, que valor que tienes. Puedes decilo mas alto pero no mas claro.... Buf!!!!!!
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